La Cordà de Paterna
sigue en el aire
El
conseller de
Gobernación, Serafín
Castellano, ha
pedido al Gobierno
central que excluya
de la Directiva
europea “los
artículos
pirotécnicos usados
en fiestas
populares,
religiosas y
tradicionales de la
Comunitat, en
especial aquellos
con movimiento
errático o
imprevisible, para
garantizar la
supervivencia de
fiestas como les ‘cordaes’,
‘despertaes’ o
‘correfocs’ que se
celebran a lo largo
y ancho de nuestra
Comunitat y que
podrían peligrar si
la transposición que
el Gobierno central
ha de hacer de la
normativa europea no
tiene en cuenta
estas
peculiaridades”.
El conseller ha
lamentado el
“secretismo” con el
que está actuando el
Gobierno central a
la hora de elaborar
esta normativa,
“puesto que a fecha
de hoy todavía no ha
remitido al Consell
el borrador del
mismo para saber en
qué términos lo está
realizando”.
La Directiva
2007/23/CE del
Parlamento y del
Consejo, de 23 de
mayo de 2007,
impedía la venta de
los artículos
mencionados por
parte de los
fabricantes, y en
contra de lo que
creen algunos, esta
directiva es de
obligado
cumplimiento para
los pirotécnicos que
quieran vender sus
productos libremente
por la Comunidad
Económica Europea.
El ministro de
industria, Miguel
Sebastián, garantizó
en febrero de este
año que la
trasposición de la
directiva europea,
que debe de hacerse
antes del 4 de enero
de 2010 y que regula
el material
pirotécnico no
perjudicará el
patrimonio turístico
y la "cultura del
fuego" del área
mediterránea. El
Ejecutivo estaba
elaborando en ese
momento un primer
borrador del real
decreto que adaptará
el ordenamiento
jurídico a los
requisitos europeos,
y en esa redacción
se recogerán las
opiniones y
aportaciones de
Comunidades
Autónomas, entidades
locales y de las
principales
asociaciones del
sector.
La Comisión Técnica
de Asuntos
Pirotécnicos de la
Comunitat
Valenciana, reunida
el 5 de mayo de
2009, ha aprobado
por unanimidad el
informe que la
Generalitat enviará
la semana siguiente
al Gobierno central
sobre la
trasposición.
Serafín Castellano
ha resaltado que
desde la Generalitat
“entendemos que
estos artículos
pirotécnicos de
movimiento errático
o imprevisible no se
venden al público y
por tanto su uso
solo se limita a
asociaciones,
Comisiones Festeras,
Federaciones y
similares
debidamente
constituidas, y por
tanto son utilizados
por fabricantes y
personas que
previamente hayan
obtenido una
formación adecuada y
en su caso deban
acreditarla y por
tanto no son el
objeto de regulación
de la directiva que
se centra en
artículos puestos en
el mercado".
En dicho informe,
también se insta al
Gobierno central a
que aprovechando la
trasposición de la
directiva, complete
y regule el uso de
los artificios de
pirotecnia que no se
ha producido en todo
su ámbito puesto que
no contempla uso de
este tipo de objetos
en ‘despertaes’, ‘cordaes’,
‘mascletaes' así
como el libre uso en
las vías públicas de
estos objetos.
“Por tanto,
entendemos-ha
continuado
Castellano-
que para esa
regulación es
necesario hacer una
distinción entre los
tipos de uso de
manera que se
diferenciaría entre
el uso particular y
el profesional”.
Al respecto, Serafín
Castellano ha
reclamado al
Gobierno socialista
la creación de una
Comisión Técnico
Jurídica de trabajo
integrada por las
administraciones
públicas con
competencias en
pirotecnia, además
de otros agentes
implicados que el
Estado determine,
con el objeto de
elaborar con mayor
celeridad una
propuesta
consensuada del
reglamento de uso de
la pólvora que
garantice la
pervivencia de las
tradiciones en la
Comunitat
Valenciana.
La
Directiva obliga
establecer una
distancia de
seguridad según el
producto que varia
entre 1 y 15 metros.
Pero señala que esa
distancia puede ser
menor si es
conveniente, por
ello, es importante
que el Gobierno
Central aproveche
esa flexibilidad
para rebajar esas
distancias de
seguridad mediante
el establecimiento
de medidas de
seguridad
equivalentes.
Otro aspecto de la
directiva hace
referencia a la
edad. Hay que
aclarar que el texto
europeo establece
unas limitaciones de
edad para la
adquisición (no el
uso) de los
artículos
pirotécnicos a 12,
14 ó 18 años, según
la categoría del
producto. En esta
cuestión y dada la
gran tradición que
se vive en la
Comunitat y que en
muchos casos esa
tradición pasa de
padres a hijos que
viven desde muy
pequeños esa cultura
de la pólvora, por
lo que debe
permitirse el uso
generalizado de la
pirotecnia con los
limites actuales de
edad, incluso
rebajarla en
productos de
categoría 1 (sin
elementos
detonantes).
De este modo, se
permitiría que los
menores bajo
supervisión y
responsabilidad de
un adulto pueda usar
artículos en las
fiestas
tradicionales,
culturales, nunca
adquirirlos. En este
sentido, la Comisión
cree que seria clave
que el Gobierno
establezca un
sistema de formación
no reglada, a
desarrollar por las
Comunidades
Autónomas, que
permita bajar dichas
limitaciones de edad
para quienes hayan
seguido cursos de
instrucción técnica
adecuada, acorde con
el riesgo que
presenta cada
categoría y edad de
uso y en su caso,
que deba
acreditarse.
La Cordà, como se
ve, sigue en el
aire, no solo hace
falta que la fiesta
esté regulada y
cumpla unas medidas
de seguridad, ni tan
siquiera viajar a la
sede del Parlamento
Europeo. Es
necesario que la
transposición de la
Directiva se ejecute
de tal forma que
indique que los
fabricantes pueden
seguir haciendo y
vendiendo los
borrachos y femellas,
aunque sea bajo una
normativa diferente
o especial, mas allá
de su uso.
Para
ello se deben aunar
esfuerzos con peñas,
Consejo de la Cordà, federaciones,
asociaciones,
ayuntamientos y el
sector pirotécnico
de la Comunitat
Valenciana, que
representa alrededor
del 45% de la
producción,
trabajadores, y
exportaciones del
total nacional.
Teniendo en cuenta
que el 95% de los
592 municipios de la
Comunitat Valenciana
celebran ‘cordaes’,
entre otras
festividades con
fuego.
No hace mucho
unos vecinos
intentaron crear un
movimiento en
Paterna para ayudar
a evitar la
desaparición de
estas tradiciones,
pero algún miembro
del sector
"oficial", no vio
con muy buenos ojos
el ruido que se
estaba haciendo.