Cinco colegios
permanecen abiertos
en julio para acoger
la Escuela de Verano
La
teniente de alcalde
Elena Martínez y el
concejal de
Educación del
Ayuntamiento de
Paterna, Ignacio
Gabarda, han
visitado algunas de
las escuelas de
verano repartidas
por el municipio
para comprobar el
buen funcionamiento
de estas y la
acogida que han
tenido por parte de
los más pequeños.
Los colegios
públicos La Font,
Vicente Mortes,
Villar Palasí y
Jaume I abrirán sus
puertas el mes de
julio como “Escoleta
d’Estiu” al servicio
de los niños de
Paterna. Las
actividades
preparadas por los
diferentes centros
comenzaron el 1 de
julio y se
mantendrán a lo
largo de este mes.
Las diferentes
escuelas de verano
municipales han
preparado talleres y
dinámicas lúdicas,
basadas en los
elementos lúdicos y
que buscan crear
para los niños un
entorno agradable y
divertido y en el
que los padres
puedan confiar.
460 niños entre
los distintos
centros
Este
año, el eje
argumental de las
escuelas de verano
es la música, y cada
centro plantea las
actividades
propuestas desde la
organización según
las necesidades
específicas de su
colegio y alumnos.
Los niños, además,
cuentan con dos
jornadas a la semana
de piscina en las
instalaciones
municipales y
lecciones de
Educación Vial de la
mano de agentes de
la Policía Local que
acuden expresamente
a los centros. Para
la atención y los
cuidados de los
pequeños, el
Ayuntamiento ha
dispuesto a
empleados de la
empresa municipal,
becarios del
programa “La Dipu te
Beca” y estudiantes
en prácticas. En
total, 38 monitores
estarán repartidos
por los diferentes
centros. Además,
desde la Concejalía
de Educación
destacan la
inclusión de
monitores
especializados que
estarán a cargo de
niños con
necesidades
específicas.
Alrededor de 460
niños de entre doce
y cuatro años
disfrutarán de las
cuatro escuelas de
verano. Además, 127
niños, repartidos
por todas las
escuelas, contarán
con una beca de la
Consellería de
Bienestar para poder
asistir a la escuela
de verano y
disfrutar del
comedor. Estos niños
recibirán las mismas
atenciones y
realizarán con
normalidad todas las
actividades
propuestas durante
el cursillo. Los
niños matriculados
podrán asistir a la
escoleta durante
todo el mes de julio
o durante alguna de
las dos quincenas.
Por otra parte, el
coste de las
actividades para el
resto de familias es
de 130 euros, con
descuentos en el
caso de hermanos. El
servicio de comedor
tiene un coste de 60
euros. Además, las
“escoletes” cuentan
con servicios de
guardería por la
mañana y por la
tarde y de autobús
para los vecinos de
los barrios
periféricos. Las
actividades lúdicas
dan comienzo a las
9:30 horas hasta las
13:30 horas.
Cada niño en el
colegio mas cercano
a su barrio
Los
educadores y
monitores de las
diferentes escuelas
de verano destacan
el éxito del
programa de
inclusión para los
niños en riesgo de
vulnerabilidad, ya
que están
completamente
integrados en las
aulas y en las
actividades. Además,
según informan los
monitores, esta
diversidad favorece
la creación de
nuevas y
enriquecedoras
relaciones y crea un
entorno muy natural
entre los niños. El
concejal de
Educación, Ignacio
Gabarda, ha
destacado que "las
escuelas de verano
municipales son un
servicio acorde con
las necesidades de
las familias, por
eso se incluyen
horarios más
flexibles, así como
facilidades en el
transporte y los
medios necesarios
para la integración
de los menores en
los diferentes
ámbitos".
La distribución de
los menores entre
los cuatro centros
se ha realizado
según el barrio al
que pertenecen y,
sobretodo, teniendo
muy en cuenta el
colegio en el que
estaba escolarizado
cada niño. Las
plazas para acudir a
la escuela de
verano, según
informan desde la
Concejalía de
Educación, no son
limitadas y se
disponen en función
del número de
familias que
requieren este
servicio y de la
localización de sus
viviendas. Los
colegios públicos
que albergarán esta
iniciativa están
repartidos por los
diferentes barrios
del municipio. Los
vecinos de la
Canyada dispondrán
del CP. La Font, los
niños de los barrios
de Valterna, La Coma
y Terramelar
acudirán al CP.
Jaume I, mientras
que los colegios
públicos Villar
Palasí y Vicente
Mortes se encargarán
de dar el servicio a
las familias
repartidas por los
barrios céntricos.
35 menores en el
Patronato Francisco
Esteve
Por su parte, el
Patronato Francisco
Esteve, el centro de
educación especial
de la localidad,
acogerá durante el
verano a niños del
municipio con
dificultades
psíquicas o físicas
que hayan estado o
no matriculados
durante el resto del
curso. La escuela de
verano del Patronato
Francisco Esteve
acoge en sus aulas a
35 menores que
presentan alguna
discapacidad, cinco
de ellos no
matriculados en la
institución durante
el curso escolar.
Las monitoras del
centro destacan que
intentan plantear
los diferentes
talleres como algo
lúdico, pero sin
olvidar la necesidad
de seguir trabajando
la autonomía y
mejorando. Los niños
realizan talleres de
cocina o cuenta
cuentos, además de
disfrutar de
actividades
acuáticas en la
piscina y paseos por
el mercado para
reforzar la
autonomía. Este
proyecto, según
explica el gerente
del patronato,
Arturo Riquelme,
está siendo
financiada por el
Ayuntamiento de
Paterna desde hace
cinco años; este año
la dotación ha sido
de más de 20.000
euros. Además, la
escuela cuenta con
monitores
voluntarios, que
también cuentan con
la formación
necesaria.
La mayoría de las
actividades de las
diferentes escuelas
de verano se
clausurarán el
próximo jueves 31 de
julio, con fiestas y
celebraciones que ya
se están preparando
en cada una de
ellas. Este año,
como novedad,
algunos centros
permanecerán
abiertos hasta la
segunda quincena de
agosto con la
finalidad de suplir
las necesidades de
los 127 niños que
disfrutan de una
beca de Consellería.