Obras de
pluviales de la
c\133 y el Barranco
del Rubio con
petición de dimisión
El
barrio de La Canyada
ha visto como los
concejales de los
distintos grupos
políticos del
Ayuntamiento, con
sus respectivos
apoyos vecinales, se
han enfrentado en
los medios de
comunicación
paralizando el
proyecto inicial del
Ayuntamiento
mediante un
sistema de drenaje
en la calle 133
hasta que se
consulte a los
vecinos.
Tras la reunión
mantenida el lunes 6
de octubre con
un centenar de
afectados por
inundaciones en este
tramo y el Barranco
del Rubio, se va a
proceder a dar
prioridad al rebaje
de aceras y
construcción de un
nuevo cajón de
captación de agua
bajo el ferrocarril.
El Ayuntamiento de
Paterna ha abierto
un plazo de una
semana antes de
decidir la solución
definitiva a las
obras de mejora del
drenaje de pluviales
en la calle 133.
Durante este tiempo,
en el que los
vecinos presentarán
un escrito con
propuestas para ser
valoradas y
validadas por los
técnicos, las obras
no se detendrán,
pero se dará
prioridad a la parte
de las mismas que sí
cuenta con el
necesario consenso
vecinal, como es el
rebaje de aceras
para facilitar el
acceso del agua a la
zona verde y la
ampliación del cajón
bajo las vías del
tren en el cruce de
las calles 133 y 17.
Se finalizarán las
tres balsas de
laminación que ya
están prácticamente
ejecutadas, pero no
se acometerán por el
momento las seis
restantes. Esta fue
la decisión tomada
por la teniente
alcalde de
Servicios, Marisa
Ferre, con el
respaldo de la
alcaldesa, Elena
Martínez.
Compromís cree que
Ferré ha "reculado"
en su decisión y
"pide su dimisión
dada su incapacidad
para reaccionar ante
un grave problema".
Comenzar
las obras por lo que
están de acuerdo los
vecinos
La
reunión comenzó con
una explicación por
parte de los
ingenieros acerca
del objeto y
justificación del
proyecto Sistema de
Drenaje Sostenible
de la calle 133, que
en síntesis es la
“reducción drástica
de las inundaciones
en la zona”. Los
técnicos indicaron
que se pretende
lograr mediante la
construcción de las
balsas de laminación
la retención
temporal del caudal
de agua durante los
episodios de lluvia
torrencial, para
derivarlo
gradualmente al
colector que recorre
la calle, mejorando
su eficacia. Un
número razonable de
vecinos no dio su
visto bueno a esta
actuación, pues
consideran que
tendrá una
afectación negativa
a la estética de la
zona verde y para el
esparcimiento
vecinal. Sí son del
agrado de los
vecinos las obras
que contemplan la
resolución de un
punto crítico como
es el cruce bajo las
vías de ferrocarril
en el que se puede
concentrar mucha
agua durante una
tormenta. Para ello
se proyecta la
construcción de un
nuevo cajón de
hormigón con una
anchura de 4,5
metros por 0,6 de
altura, con el fin
de incrementar la
capacidad hidráulica
en el cruce de las
calles 133 y 17.
Esta actuación,
junto con el rebaje
de aceras se ha
decidido prioritaria
por parte de
técnicos y vecinos.
Los socialistas
critican que
se "haya malgastado
el dinero público al
destinar más de 3
millones de euros en
2012 del Plan
Confianza a un
proyecto de
urbanización y
canalización de
aguas de la calle
133 a sabiendas de
que iba a ser
ineficaz y que no ha
hecho más que
ocasionar
preocupaciones a los
vecinos al convertir
la calle en un río
cada vez que
llueve".
El Barranco del
Rubio se encauzará
soterrado al
solicitarlo los
vecinos por 2,5
millones mas
Por
otro lado, durante
la reunión se
aprovechó también
para presentar el
Estudio de
Soluciones para el
Encauzamiento de
Barranco del Rubio.
Tal y como
solicitaron los
vecinos, y como se
comprometió la
concejala Marisa
Ferre el pasado
verano, los
ingenieros han
modificado la
propuesta para pasar
de un encauzamiento
a cielo abierto a
una solución de
encauzamiento
cerrado. Esta
actuación es posible
porque al contrario
que en el caso de
Barranco Barato la
Confederación
Hidrográfica del
Júcar sí permite la
opción de enterrado
porque no considera
la parte urbana del
barranco del Rubio
como Dominio Público
Hidráulico. Según el
citado estudio de
soluciones, las
pluviales serían
transportadas por
medio de un marco de
3,5 x 2 metros. En
las calles
perpendiculares al
Barranco del Rubio
se colocarán
rejillas conectadas
también a los pozos
de registro. El
encauzamiento
cerrado es del
agrado de los
vecinos, salvando
algunos detalles que
se apuntaron e por
parte de los
técnicos. Como
ventajas respecto al
encauzamiento a
cielo abierto hay
que destacar el
hecho de que no se
pierden
aparcamientos y
mantiene aceras con
un ancho de 2,90
metros. La solución
a cielo abierto
asegura mejor la
captación de la
escorrentía y tiene
un Presupuesto de
Ejecución Material
de 3,2 millones de
euros por los 5,7
millones del
encauzamiento
enterrado. El
Consejo de
Administración de
Aigües de Paterna
tiene previsto
aprobar en su
próxima reunió
encargar la
redacción del
proyecto soterrado
en las condiciones
apuntadas por los
vecinos.
Y es que de una
forma u otra, la
mala gestión de los
ayuntamientos que
dejan construir
viviendas en
barrancos a
promotores y
vecinos, sin
ejecutar obras de
alcantarillado de
pluviales,
garantizando la
evacuación natural
del agua, al final
siempre terminan
pagándolo los
mismos, todos los
vecinos.