Campaña contra el
ruido y por la
convivencia entre
vecinos
Si
en mayo fue la AVV
Campamento-Paterna
la que recordó su
campaña anual de
convivencia en
comunidad
repartiendo 500
folletos, ahora,
tras comunicarle la
misma, es el
Ayuntamiento el que
ha puesto en marcha
una campaña contra
la contaminación
acústica y la
promoción de la
convivencia entre
los vecinos y
vecinas del
municipio,
especialmente en
zonas residenciales.
Bajo el lema “Con
menos ruido convives
mejor”, la
iniciativa tiene
como objetivo
concienciar a los
ciudadanos de la
importancia de
evitar ruidos que
puedan alterar la
tranquilidad de sus
vecinos,
especialmente
durante las horas de
descanso.
“Hemos recibidos
muchas quejas sobre
problemas derivados
del ruido entre
vecinos, por lo que
veíamos necesaria
una campaña que
promoviese buenas
prácticas y el
respeto vecinal como
bases de una buena
convivencia” ha
señalado la
concejala de
Seguridad,
Infraestructuras y
Medio Ambiente,
Nuria Campos.
Para ello, el
consistorio
distribuirá
cartelería y más de
2.000 folletos por
el municipio, con
consejos para evitar
molestias entre
vecinos,
especialmente con la
llegada del buen
tiempo y el aumento
de las actividades
al aire libre.
Entre las
recomendaciones que
podemos encontrar se
incluye evitar
ruidos que puedan
alterar el descanso
de los vecinos como
vociferar o mover
muebles
especialmente
después de las diez
de la noche,
mantener un sonido
apropiado a la hora
de ver la televisión
o escuchar música,
evitar en la medida
de lo posible los
ruidos de las
mascotas o disfrutar
al aire libre
respetando las horas
de descanso.
Además de la
campaña, la
concejala de
Seguridad,
Infraestructuras y
Medio Ambiente,
Nuria Campos, ha
recordado que
“Paterna cuenta con
una normativa sobre
protección contra
ruidos y vibraciones
que establece los
valores permitidos y
limita los ruidos en
zonas residenciales
según horarios”.
En ese sentido, en
la ordenanza
municipal se
establece que los
decibelios
permitidos en
horario diurno no
pueden superar los
50 decibelios, y de
las diez de la noche
a las ocho de la
mañana la limitación
se reduce a los 40
decibelios.
Por último, desde la
Concejalía de
Seguridad,
Infraestructuras y
Medio Ambiente, han
explicado que vivir
en un entorno
ruidoso puede llevar
a los ciudadanos a
desarrollar ciertas
patologías como
irritabilidad,
estrés o ansiedad,
alteraciones del
sueño que se
traducen en
cansancio y bajo
rendimiento, o un
aumento de la
frecuencia cardíaca
y la presión
arterial. Además han
resaltado que en
entornos donde se
superan los más de
90 decibelios, se
pueden generar
problemas auditivos
como pitidos
constantes en los
oídos e incluso
pérdida de audición.